El joven que tumbó a Hollywood

¿Se imagina vencer en un proceso judicial a Lauren Films, Universal Pictures, Twentieth Century Fox, Warner Home Video,  Paramount Home Entertaiment, Walt Disney  Company, Columbia Tristar y Manga Films? Pues todas estas compañías con su sede central en Hollywood se unieron contra un joven onubense, en la lucha por cerrar sus  páginas webs de descargas de películas y de paso el debate por la descarga P2P que en esos momentos estaba en el candelero nacional. Eso es lo que le ocurrió a Morphoide (como se hace llamar en internet), Juan José Coronel a pie de calle,  con un proceso judicial en el que todas las compañías  intercedieron por vía penal contra este joven que vivió duros momentos ya que la acusación de los abogados de estas multinacionales le exigían hasta cuatro años de prisión.

Simultáneamente y por la vía civil, la Sociedad Generalde Autores y Editores (SGAE) también abrió un proceso contra este onubense que en esos momentos se convirtió en el cabeza de turco de toda la industria del cine y de los defensores de la propiedad intelectual en su afán de ejemplificar a la sociedad.

Finalmente, tras vencer estos procesos en los juzgados de Moguer que le dieron la razón. las compañías recurrieron a la Audiencia Provincial que confirmó el sobreseimiento del caso y el cierre de la última vía judicial que le quedaba a la SGAE y a las empresas multinacionales contra el denunciado.

El proceso judicial se inició en 2007 y no culminó hasta septiembre de 2010 con diversos recursos. Morphoide pudo derrocar a la todopoderosa Hollywood porque la ley española, hasta ese momento, le amparaba, algo que la puesta en marcha de la Ley Sinde puede frustrar.

Registro

Uno de los momentos más duros de todo ese proceso fue el 26 de mayo de 2009, cuando una comisión judicial compuesta por cinco personas se personó en su casa e intentaron llevarse seis discos duros de su propiedad. Aconsejado por sus abogados, a los que llamó por teléfono, el demandado terminó expulsando de su casa a las cinco personas y voluntariamente les entregó sólo uno de los discos duros, el que utilizaba para la gestión de las webs de descarga tal y como exigía el auto judicial con el que se presentaron en su casa.

De momento Morphoide ha sabido salir de situaciones muy difíciles, ahora le queda una última batalla.